Javier Tovar es la mente creativa detrás del proyecto multidisciplinar “Digital Distortion”
En las crípticas sombras del pasado, cuando la gematría susurraba secretos a los hebreos y la isopsefía revelaba noticias en griego coiné, un monje de mirada febril trazó con cálamo tembloroso el nombre de la abominación sobre un pergamino ajado. Tras una revelación, calculó sus letras en un lenguaje hierático. Sin duda, hay muchos números cargados de significado, pero ninguno como el «666«. Entre profecías y simbolismos, emergió esta fatídica cifra sellada en el códice del Apocalipsis. Ahora, Javier Tovar (1998) recupera este concepto para demostrar cómo es posible crear algo maravilloso a partir de otra cosa tradicionalmente negativa. En otras palabras, transformar lo malo en algo positivo.
No fue azar, sino aritmética del abismo. Todo muy bien atado por el idealista Javier Tovar, un diseñador pragmático, hecho a sí mismo, único en su especie. En otro momento, pudiera haber sido alquimista. La trasmutación de tejidos de segunda mano, desgastados y deshilachados, mediante serigrafía artesanal, decoloraciones y otras técnicas de “upcycling”, es algo digno de admiración. Siempre conservando su talante oscuro, rebelde, moderno y sexy.
Tras participar en el showroom para jóvenes talentos emergentes “EGO” de la MBFWMADRID, en 2021, exponiendo su primera colección “VENUS”, el diseñador ha colaborado con artistas de la talla de Mala Rodríguez, Irene Ferreiro o Luna Ki.
Hablamos con Digital Distortion sobre sus expectativas para este año.
Junk fashion, gutter punk y DIY
“Siempre me ha gustado la moda, pero fue en 2020 cuando comencé a invertir tiempo en el diseño y creación de Digital Distortion”. Javier Tovar estudió Bellas Artes. Antes de dedicarse a la moda, solía experimentar con la pintura, el dibujo y el grabado. “Comparto referencias con los artistas que sigo; de manera involuntaria, algo de su esencia queda en mi trabajo”. Entre sus influencias destacan Lady Gaga, Arca, Thierry Mugler, Vivienne Westwood, Roberto Cavalli y Alexander McQueen.
Ha vestido a Hugáceo Crujiente, Lennis Rodríguez, Onyx Unleashed, La Zowi y LVL1, entre otras. Sin embargo, no colabora en ningún atelier y todo lo que sabe lo aprendió en casa. “Después de asistir como público a la MBFWMADRID, decidí sacar de la caja una máquina de coser que me regalaron y empezar a probar”, afirma. “Si tenía dudas, buscaba en YouTube, prueba y error, muchas horas y muchas ganas”.
Reinventar el “666” tras una larga historia de connotaciones negativas
“Con esta colección quiero reivindicar la aceptación y el respeto hacia todas las identidades, especialmente aquellas que han sido marginadas en algún momento”. Una propuesta que celebra lo inconveniente como herramienta de empoderamiento personal y libertad creativa, en donde la comunidad racializada, queer e inadaptada también encuentra su espacio.
“Esta colección estaba casi lista a finales de 2022, pero por diferentes motivos ha salido ahora a principios de 2025”. Mientras tanto, un par de looks de Digital Distortion han cruzado el charco para aterrizar en Nueva York y Santo Domingo. “He recuperado la emoción… Vamos a ver si se puede estirar un poco, seguir con proyectos nuevos y todo lo que venga”.
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